Son técnicas que se adaptan a cada paciente en particular según las necesidades del mismo. Dependiendo del tejido afectado se pueden usar diferentes técnicas y mas de una a la vez si fuera el caso.
Las técnicas se dividen en3 grandes grupos: estructurales, craneales y viscerales.
Técnicas Estructurales
Primero evaluamos los rangos libres y restringidos de cada articulación. Luego, seleccionamos la técnica más adecuada para mejorar la movilidad articular, aumentar la circulación sanguínea y romper el arco reflejo del sistema nervioso que mantiene la disfunción.
Estas técnicas no son dolorosas, ya que respetan los parámetros fisiológicos de la articulación, permitiendo un movimiento rápido y preciso
Técnicas Viscerales
El sistema digestivo puede verse afectado por patologías como gastritis, colon irritable, estreñimiento, hinchazón abdominal y pesadez.
Con estas manipulaciones, se mejora la circulación venosa, se reduce la sensibilidad de los tejidos y se optimiza el funcionamiento de los órganos digestivos.
Técnicas Craneales
El cráneo protege estructuras vitales, como nervios, arterias y venas.
Durante un parto complicado, estas estructuras pueden sufrir alteraciones que impactan en la vida adulta.
El tratamiento craneal es clave para normalizar el sistema nervioso central y autónomo, y asegurar el correcto funcionamiento del sistema respiratorio, ocular, auditivo y del equilibrio.
Es ideal para tratar condiciones como ojo seco, lagrimeo, sinusitis, migrañas, estrés, vértigos y mareos, entre otras.